Con una serie de ideas se puede conseguir un baño renovado, cómodo y bonito. Además, podremos ganar amplitud y luz. Todo ello de forma sencilla. En primer lugar, se debe optar por muebles bajolavabo y estanterías hechas medida pues aprovechan al máximo el espacio disponible y se adaptan a la forma de la planta.
Además, tenemos que apostar por un baño ergonómico. Para una zona de lavabo cómoda, intenta que éste se sitúe al menos a 85 centímetros del suelo. También se dejan unos 60 centímetros libres para facilitar los movimentos; y 70 centímetros despejados ante la lucha para secarse.
En cuanto a la ducha, un buena opción pasar por una cabina acristalada. Una ducha cerrada con cristal tiene ventajas: no se corta el espacio, deja pasar la luz y da sensación de amplitud. Sino se puede elegir una mampara de cristal en lugar de la clásica cortina, pues es más práctica, moderna y prolonga la perspectiva visual.
Otra idea que triunfa es apostar por los tonos claros. No hay nada mejor para ganar luz y amplitud que elegir blancos, cremas, pastel, … Además, dará un toque alegre y jovial al baño.
Si tenemos bañera en vez de ducha, se puede usar la pared de la bañera para colgar prácticas baldas, hornacinas o repisas de obra que permitirán tener a mano todos los geles, champús, toallas, esponjas, etc. Asimismo, un radiador-toallero en la pared de la bañera aprovecha muy bien el espacio y permite tener toallas calentitas y a mano. También se puede aprovechar la esquina con un mueble rinconero de gran capacidad, o si el espacio lo permite, con una bañera angular.
Por último, se pueden sacar partido a las paredes con baldas, perchas, armarios con espejos … y ganar así más capacidad de almacenar y tener todo a mano. Finalmente, un gran espejo en las paredes aumenta la sensación de la amplitud visual y multiplica la luz, lo que viene muy bien en caso de tener un aseo pequeño.
Foto vía El Rincón de Sonia