Existen una serie de cosas que pueden llegar a estropar el cuarto de baño. Suelen ocurrir con frecuencia y nos traen de cabeza, pero tienen solución.
1º. El moho:
El moho sale en el borde de la bañera y la ducha al estropearse la silicona. Las de nueva generación sellan herméticamente y son superresistentes, incluso al agua caliente y los limpiadores abrasivos.
2º. El óxido:
El óxido afecta sobre todo a los grifos. Para mantenerlos como nuevos hay limpiadores que los protegen y dan brillo. Y si se van a renovar, los hay con recubrimiento electolítico, anticorrosión.
3º. La condesación y el agua:
La condensación y el agua hacen que las juntas en los muebles sufran mucho; peor eso, cuanto menos se tengan, mucho mejor. Para proteger los muebles, hay que darles un esmalte al agua multisuperficies; los hay con agentes antimoho.
4º. Los productos de limpieza abrasivos:
Estos productos se comen el brillo de los sanitarios. Se puede evitar usando limpiadores sin lejías, pero que esterilicen. Algunos eliminan el 99% de las bacterias. Si ya están mates, se puede reavivar su brillo limpiándolos con productos a base de resinas sintéticas. Y si están muy estropeados, se tienen que volver a esmaltar. Lo puedes hacer tú mismo si tienes los kits con todo lo necesario para ello.
5º. Las manchas en la encimera:
Las manchas en la encimera las producen las creamas, las colonias … Hay que limpiar los botes, los frascos antes de ponerlos en ella. Y si cae algo de contenido, hay que recogerlo enseguida par que no penetre.
Para quitar las marcas se tiene que puliar la zona y dar un reparador si es de mármol o aceite restaurador si es de madera. Las de cuarzo se frotan con estropajo, tipo Scoth-Brite, y un líquido específico que limpia y reaviva el brillo.
Foto vía ToxMistery
