Decoración de interiores

Si sois amantes del interiorismo y la decoración seguro os estará encantando una tendencia que vuelve. Llevamos un año más o menos viendo cómo el papel pintado está de nuevo de moda, rescatando una tendencia de los años setenta que dio mucho de sí. La verdad es que la idea es genial, ahora que se lleva todo lo retro y que a cualquier cosa colocamos la etiqueta de ‘vintage’.

Lo cierto es que esta propuesta de estilo es ideal tanto para las estancias comunes como en los dormitorios. Donde mejor suele resultar es en el salón, en la entrada y en los pasillos, combinándose con cierto paredes con papel y otras con pintura, con colores que vayan acordes. En general, están triunfando tanto los tonos suaves como los colores fuertes, los estampados geométricos, diseños floreados… los hay para todos los gustos, aunque la voz cantante la llevan los diseños de los 70.

Las ventajas de apostar por esta fórmula para ‘vestir’ nuestras casas es que nos da más posibilidades decorativas y permite que nuestra casa sea más original, ya que no todo el mundo se anima a empapelar su vivienda. Otra cualidad del papel pintado es que puede ayudar a cubrir algunas imperfecciones en paredes que queramos cubrir y que no se vea, que se ‘tapa’ mejor así que con la pintura.

A la hora de limpiar las paredes, el papel pintado también facilita la tarea. Basta pasar un trapo húmedo por encima y listo. Este aspecto hay que valorarlo hoy en día, que tenemos muy poquito tiempo por el ritmo de vida diaria que llevamos.

Teniendo esto en cuenta, esperamos que si os animáis a empapelar la pared nos contéis vuestras experiencias. También qué tipo de papel habéis usado. Ah, y a modo de consejo, os recomendamos que compréis siempre más papel pintado del necesario, por si en algún momento necesitarais ampliar la superficie de papel o bien se os rompiera o deteriorara alguna parte.

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