La decoración de Halloween en un hogar es clave si se prepara una fiesta con este motivo, ya sea para niños o para adultos. A causa de los tiempos que corren, la mejor idea es aprovechar varios objetos que no se usan y el material reciclable y barato para realizar los elementos decorativos tradicionales.
Fantasmas, arañas, calabazas, brujas, calaveras y murciélagos son varios de los elementos decorativos más populares de esta fiesta. Todo ello es clave para crear el ambiente típico de Halloween.
Uno de los elementos decorativos para Halloween más sencillo de hacer en casa son las tradicionales calabazas. Además, para no gastar dinero y tiempo comprando y vaciando las calabazas, se pueden realizar tres calabazas originales y mucho más baratas.
Para hacer una de ellas hay que comprar globos de color naranja, inflarlos y pintar con un rotulador varias caras. Otra idea es realizar pequeñas calabazas para decorar la mesa de Halloween con los típicos pompones de lana.
Además, si uno desea lámparas de calabaza lo mejor es usar botes de cristal, decorarlos con cartulina y dibujando una cara y utilizar el interior del bote para meter una vela.
Y si eres de los que no se te ocurren muchas ideas o quieres gastar poco en tu decoración, por Internet podrás encontrar gente que publica anuncios alquilando o vendiendo decoraciones de Halloween. Puedes consultar en portales como olx.com.ar donde ya verás como encontrar una variada oferta de anuncios de elementos decorativos a muy buen precio.
También triunfa en Halloween es realizar muñecos momia, es muy fácil y original. Tan solo se tiene que coger un par de muñecos o peluches de niños y envolverlos con gasas blancas o bien con papel.
Además, siempre queda muy bien decorar la casa en esta fiesta con una serie de fantasmas. Al igual que con las calabazas, se pueden usar globos, en este caso de color blanco.
Sin embargo, los fantasmas para Halloween se pueden fabricar con muchos objetos reciclados, como botellas o vasos de plástico e incluso con hojas. Lo relevante es pintar estos elementos de color blanco y luego dibujar en negro dos ojos y una boca abierta.
Venga, que ya queda poco. Ve preparando todo para esa noche de «miedo y terror», donde seguro que los pequeños y los no tan pequeños os lo pasaréis en grande.
¡Y no te olvides de los caramelos!
