Se puede conseguir que un sillón de mimbre que esté deteriorado tenga un nuevo uso y sacarle partido. Para ello, hay que ponerse manos a la obra hasta transformarlo en un coqueto asiento, una butaca actualizada.
Para ello se necesitan los siguientes materiales: una butaca de mimbre; tablero; papel; tela a rayas; tela para el contorno; guata; sierra de calar; grapadora de tapicero; lápiz; tijeras; metro; aguja; e hilo.
A continuación, hay que ponerse manos a la obra. En primer lugar, se tiene que medir el ancho y el largo del asiento con una cinta métrica y realizar una plantilla de papel con las medidas tomadas.
Luego, hay que colocar la plantilla de papel sobre el tablero de madera y dibujar el contorno con un lápiz. Después, se tiene que cortar el contorno con la sierra de talar.
El siguiente paso es poner la tela del asiento con el derecho hacia abajo, encima la guata y luego el tablero. Para ello hay que cortar la guata dejando aproximadamente unos diez centímetros de margen y la tela con unos 15 centímetros. A continuación, se tiene que doblar ambas sobre la madera y se van grapando. Después, con cuidado, se corta la tela sobrante de las esquinas.
A renglón seguido, hay que cortar unas tiras de guata de unos 15 centímetros de ancho y enrollarlas alrededor del contorno de la butaca con precisión. Para que se sujeten hay que darles una puntadas de hilo a cada tira una vez se haya enrollado.
Así, se repite esta misma operación con la tela y se habrá acabado. Ya se tendrá fabricada una butaca nueva a paritr de una sillón de mimbre que estaba sin usar e iba a ser llevada al trastero o tirado a la basura. Solo queda elegir donde colocar este nuevo coqueto asiento en el hogar.
Foto vía Casa Diez
