La cocina y el baño son dos estancias muy transitadas y vitales en un hogar. Por ello, se debe cuidarlos y mimarlos. Con una serie de pequeños cambios podremos ganar en higinie y limpieza, además de forma económica y sencilla.
En primer lugar, debemos hacerlos más higiénicos y fáciles de limpiar. Para ello se pueden renovar las paredes con paneles sintéticos de aspecto cerámico que se pegan al azuelejo. Son resistentes al algua, al calor y la grasa, y las juntas no se ennegrecen. Para el suelo, recomiendo utiliar los laminados hidrófugos o vinilícos antideslizantse sin juntas. Asismismo, para los techosse deben usar pinturas antigrasa en la cocina y pinturas antihumedad en el baño.
Por otra parte, hay que combatir las huellas de los dedos y cal y del moho. Si se cambian los grifos por por otros antical y antihuellas, y encima se usa una mampara con tratamiento antical en el baño, durarán más y no será necesario limpiarlos tanto. Además, para evitar el moho en el baño, hay que poner extractores, deshumidificadores o/y toalleros eléctricos.
También debemos proteger las tuberías de la cal e impurezas del agua con dispositivos magnéticos antiincrustantes, y los electrodomésticos con protectores de sobretensión. Además, se pueden cambiar las bisagras de las puertas de los armarios por otras con freno, y el zócalo de la cocina, por uno metálico, más resistente a la humedad.
Por último, debemos apostar decididamente por gastar menos energía y agua. El ahorro resulta clave en nuestro hogar y , por ende, en la sociedad. En primer lugar, hay que optar por cambiar las bombillas por unas led o de bajo consumo; se ahorrará un 80%. Y con detectores de presencia con temporizador, que evitan que la luz quede encendida, la factura bajará un 10%.
Finalmente, se deben poner unos perlizadores en los grifos, cambiar la laca por una de inducción y la cisterna por una de doble descarga , se gastará la miad cada vez que se usen.
