Hablando de Tokujin Yoshioka, quiero destacar la tienda que realizó en Ginza, uno de los barrios más exclusivo y vanguardista de Tokio (Japón). Fue seleccionado por la firma austríaca Swaroski para proyectar su tienda en dicho emplazamiento. www.swaroski.com

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Su concepto de tienda era realizar un bosque de cristal el cual empieza en la fachada, llena de estilizados hexágonos recubiertos de espejos de acero inoxidable, como si se tratase de estalactitas urbanas y que reflejan la luz y colores de la calle.

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En el interior encontramos una escalera de cristales, además de una cascada formada por diminutas piezas del mismo material. Todas las paredes están hechas con prismas blancos creando una textura que adopta varias formas, tamaños y longitudes, así como brillos irisados que siempre han caracterizado a la firma, algo que se advierte nada más cruzar el umbral.

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En el primer piso se encuentra la línea de joyería y accesorios como bolsos, ropa, objetos de decoración de Swaroski, así como las colecciones de temporada. En el segundo piso está la colección completa de Daniel Swaroski. Así que este material fue la inspiración para el diseñador y la visita a la tienda supone un viaje a la pureza del material, que en el caso de Swaroski se entiende como el arte del cristal tallado, con una experiencia de más de cien años y que sigue adelante con su expansión.

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Todo un derroche de glamour.

Fotos: Flickr, Tokujin yoshioka, Swaroski

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