Llega el buen tiempo y las visitas a los hogares aumentan. Apetece salir de casa, visitar a los amigos y pasar un rato en sus casas. Por ello, si uno recibe visitas en estas fechas debe tener su vivienda lista para las mismas. Se debe intentar que se sienten como en la suya; para lograrlo hay que cuidar todos los detalles, pero no solo los decorativos.
1º. Muebles bonitos, pero cómodos y bien protegidos:
En el salón se puede apostar por sofás desenfundables y de aspecto acogedor. Así, los amigos no tendrán miedo de ponerse comodos en los sofás así como tampoco estarán pendientes de si se cae algo.
Además, una alfombra mullida invita a quitarse los zapatos o sentarse directamente en ella. Y la mesa del salón debe ser robusta y bonita.
2º. Apuesta por la sencillez:
En esto manda el «menos es más». Por ejemplo, las cortinas deben ser sencillas para dejar que pase la luz y se vea el paisaje. Y como asientos extras se pueden optar por unos sencillos taburetes rúticos que quedan genial y apenas ocupan espacio.
3º. Unas bonitas champaneras:
Unas champaneras como macetero darán un toque de fiesta discreto, pero muy vistoso. El resto lo harán las flores que se elijan, como pueden ser unas preciosas orquídeas.
4º. Unas singulares fundas para las sillas:
Se pueden encargar unas fundas para las sillas hechas con algún tejido vaporos (gasa, muselina,…) y colocarlas cuando vengan los amigos a la casa. Se pueden comprar nuevas o buscar en páginas web de clasificados gratis donde encontrarás más de una opción económica y en perfecto estado. Quedará muy bonito y, encima, las sillas estarán protegidas.
5º. Una mesa bien puesta:
Una mesa de comedor bien puesta, elegante y práctica siempre da mucho juego. Por ejemplo, se puede aposar por un mantel largo blanco, que da elegancia, y encima, un sobremantel o unos caminos de mesa en un color más sufrido. Ademas, los cojines repiten los colores de la mesa.
Foto vía Mujerhoy.com
