Es una técnica barata, fácil de aplicar y da personalidad a los objetos que customizas, no te lo pienses más y apúntate a la fiebre de forrar los objetos, sólo necesitarás el papel adecuado, un poco de cola diluida y ¡a forrar!.
Ya hemos comentado alguna vez que las épocas de crisis son muy buenas para el interiorismo, porque a falta de dinero aumenta la creatividad; pues la técnica del forrado es una de las opciones de «hazlo tú mismo» que más está calando, y no viene sólo aplicado a pequeños objetos, sino a mesas enteras o sillas, vamos a ver algunos ejemplos:
Todos los papeles son buenos para forrar, sólo hay que saber un poco nuestras aficiones (reales o soñadas) y escoger objeto. Se están utilizando mucho para cubrir superficies el papel de periódicos (al ser posible extranjeros), partituras, páginas de comics o mapas del mundo (sobre todo los antiguos).
Lo importante del papel es que tenga una consistencia suficiente para que no se rompa mientras los manipulamos. ¿Y como pegamos este papel a la superficie? Pues lo más usado es una disolución de 60 % cola blanca y 40% agua.
Lo más nuevo en esta técnica es que se ha extendido también a las lámparas, por lo que si tienes pantallas lisas (sin estampados) puedes extender algún forro que te guste sobre ella, eso sí, no optes por papel muy fino, como el de periódico, porque si está mucho tiempo encendida la lámpara se podría quemar. En este ejemplo han cubierto la pantalla blanca con un mapa del mundo, consiguiendo un acabado muy interesante:
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