Siempre hay posibilidad de arreglar y mejorar los armarios de nuestras viviendas. Se trata de aplicar una serie de ideas que encima son económicas y nada complicadas de llevar a cabo.
1º. Armario que se ha quedado anticuado:
Podemos renovarlo lijando las puertas y barnizándolas en otro tono. Si las puertas son ciegas se les puede cortar el tablero central y ponerles un cristal; parecerán otras. Otra opción es poner vinilos. Sólo hay pegarlos y los hay de muchos tonos y diseños.
2º. Una trasera abombada:
La trasera de los armarios pueden quedar abombada si habido humedad en la pared (muy común en las buhardillas). En primer lugar hay que repararla, luego darla una pintura antihumedad y dejarla secar al menos una semana.
3º. Los cajones no corren:
Si los cajones de nuestro armario no corren, tenemos un grave problema. Para arregarlos hay que ponerles unas guías telescópicas, más resistentes; además, evitan los golpes.
4º. Espejos viejos y desfasados:
Si los armarios solamente desperfectos por los extremos o los laterales, lo más sencillo pasa por pegar unas molduras para que los cubran. Si los tienen por todo el espejo, una plancha de madera o una trasera de 2 mílimetros; basta con empapelar encima.
5º. Correderas que se salen de las guías:
Para repararlas, solamente se deben cambiar los rodamientos que permiten a las puertas desplazarse por las guías. En otras ocasiones, la barra se puede caera al aflojarse los tornillos. Para solucionarlo, hay que realizar taladros nuevos y tapara los antiguos con masilla; estós solamente son seguros si se rellenan con una masilla especial, más cara.
6º. El armario de la habitación de los niños:
Si las puertas del armario están muy deterioradas lo más sencillo es cubrirlas con una plancha de melamina y ponerlos cantos de PVC para reforzarlas. De este modo, resistirán mejor el trote y los golpes. Por último, si las puertas no tienen muchos desperfectos, puede bastar con repararlas.
Foto vía Maderas Sintes