Las paredes se pueden decorar de mil maneras: un puzle gigante, ese cuadro enorme que siempre has deseado tener en el salón, la pintura echa por alguien muy querido, las fotografías de la familia, los tapices de tu abuela y los más arriesgados se atreven con el papel pintado y buenos estampados. Nosotros vamos a darte otra idea diferente, buena, original y divertida que se está poniendo de moda en muchos hogares.
Seguro que en algún momento de vuestra vida habéis tenido una frase favorita, esa que no parabas de repetir a todo el mundo; palabras que se han convertido en una filosofía o te marcaron en un periódico bueno o malo de tu vida. A veces recordar ese tipo de sabiduría nos hace darnos cuenta de quiénes somos o de quiénes queremos llegar a ser, ¿por qué no las colocamos esas frases en las paredes de nuestra casa?
Escribir en la pared no es una tarea sencilla, sobre todo si no tienes mucha maña para la pintura y el bricolaje. Es fácil hacer esta operación si empleas algún tiempo de plantillas que puedes imprimir desde casa o en una librería, también es posible ahorrarte este incómodo paso (para algunos) y comprar vinilos decorativos que contengan esa frase mítica que quieres dejar plasmada en tu pared.
La forma de componer este nuevo objetivo decorativo a base de frases o palabras puede hacerse de muchas maneras. Frases cortas, largas, palabras sueltas, descolocadas, alternando el tamaño, el estilo o la manera de realizarla: todo ello sin sobrecargar la pared para que no parezca demasiado violento a la hora de observar esa pared, lo más importante es darle un toque personal a alguna de las estancias de tu casa.
Deberás adecuar también la frase a la habitación donde la vas a colocar, el sentido y funcionalidad de un estudio (para trabajar), un salón (para relajarse) no es el mismo que una habitación (para para descansar). Elige una frase que te inspire, una palabra o incluso decora solo alternando letras, siempre y cuando te transmitan algo y todo quede en sintonía con el entorno que te rodea.
